El municipio estrenará mostrador en el expositor del Patronato Provincial de Turismo
Los valores monumentales, históricos y religiosos de la Cartuja de Vall de Crist y el santuario de la Cueva Santa han sido recogidos por primera vez en los nuevos dípticos monográficos dedicados a ambos conjuntos históricos y editados por el Ayuntamiento de Altura con la ayuda de la Conselleria de Turismo.
Además, el Ayuntamiento también ha editado un voluminoso folleto turístico y una guía de servicios existentes en el municipio, en el que el alcalde, Rafael Rubio, entiende que "hay que recuperar ese turismo que se tenía antaño y hoy ya no existe".
Los dípticos y el folleto serán las tarjetas de presentación de la villa de Altura en feria de Fitur, en la que por primera vez la población tendrá su propio mostrador dentro del stand del Patronato Provincial de Turismo. Un stand que en breve fecha editará dos póster de una panorámica de la población y algún detalle del santuario de la Cueva Santa, según adelantó hace algunos días el diputado de turismo, Manuel Martín, en el acto de la presentación pública de las guías.
Martín cree que "hace 20 años Altura era el referente turístico de la comarca del Alto Palancia, pero mientras todos los pueblos han avanzado y han creado infraestructuras, aquí las cosas se han quedado estancadas, por lo que en materia turística queda todavía mucho por hacer".
Proyectos de restauración
Los valores monumentales, históricos y religiosos de la Cartuja de Vall de Crist y el santuario de la Cueva Santa han sido recogidos por primera vez en los nuevos dípticos monográficos dedicados a ambos conjuntos históricos y editados por el Ayuntamiento de Altura con la ayuda de la Conselleria de Turismo.
Además, el Ayuntamiento también ha editado un voluminoso folleto turístico y una guía de servicios existentes en el municipio, en el que el alcalde, Rafael Rubio, entiende que "hay que recuperar ese turismo que se tenía antaño y hoy ya no existe".
Los dípticos y el folleto serán las tarjetas de presentación de la villa de Altura en feria de Fitur, en la que por primera vez la población tendrá su propio mostrador dentro del stand del Patronato Provincial de Turismo. Un stand que en breve fecha editará dos póster de una panorámica de la población y algún detalle del santuario de la Cueva Santa, según adelantó hace algunos días el diputado de turismo, Manuel Martín, en el acto de la presentación pública de las guías.
Martín cree que "hace 20 años Altura era el referente turístico de la comarca del Alto Palancia, pero mientras todos los pueblos han avanzado y han creado infraestructuras, aquí las cosas se han quedado estancadas, por lo que en materia turística queda todavía mucho por hacer".
Proyectos de restauración
La iglesia Mayor o de Nuestra Señora de los Ángeles de la Cartuja de Vall de Crist está siendo restaurado actualmente por la empresa Edificaciones y Construcciones La Vall (Edycon), a la que el pasado año se adjudicó el proyecto por un valor de 541.640 euros, con cargo a la Generalitat Valenciana y al 1% cultural del Ministerio de Fomento.
El proyecto de restauración, que comprende la consolidación de los muros y la cubrición de la techumbre de la iglesia, viene a coincidir en el tiempo con el sexto centenario de su construcción.
El santuario de la Cueva Santa es uno de los valores turísticos más importantes y conocidos de la villa de Altura, hasta el que anualmente se acercan varias decenas de miles de creyentes procedentes de toda la geografía española.
El peregrinaje oficial empieza con la romería hasta el santuario realizada anualmente por los alturanos el último sábado del mes de abril, única fecha del año en la que la imagen de la virgen es bajada de su altar y ofrecida a la feligresía para besarla.
Historia del recinto monacal
Cercana al municipio de Altura se encuentra esta cartuja de Vall de Crist. En 1385 el Papa Clemente VII concedió una bula al infante Don Martín de Aragón para la construcción de una cartuja, en el lugar en que había comprado unas pequeñas masías que serían la base de la futura cartuja, en el valle de Cánava. En 1386 comienza la construcción del llamado claustro antiguo, y de la iglesia de San Martín (en los que intervino, el albañil de Segorbe, Juan Pedro Terol).
En un primer momento se instalaron seis monjes procedentes de la Cartuja de Scala Dei de Zaragoza. En 1405 se inicia la construcción de la iglesia mayor y el claustro mayor. El conjunto estaba rodeado por unas murallas de cierre realizadas con mampostería y tapial con acceso a través de una portada de arco de medio punto con grandes dovelas.
La cartuja estaba dividida en dos partes, por un lado los edificios religiosos y los comunes, y por otro el claustro mayor alrededor del cual se disponían las celdas.
Publicado en el Diario -Las Provincias de Castellón
No hay comentarios:
Publicar un comentario